Los defensores sagrados del medio ambiente, los inefables Santos y Saavedra, y de yapa el curita cacherito; no han dicho esta boca es mía en el conflicto generado por los mineros ilegales.
La minería ilegal depreda nuestras selvas vírgenes, destroza inmisericordemente todos los hábitat donde trabajan, incluidos los apus "sagrados" que defienden los payasos cajamarquinos y por cierto, también destrozando los humedales y bofedales que también dicen defender los rojos devenidos en "ambientalistas".
En la misma región Cajamarca, miles de mineros ilegales destrozan las hermosas provincias de Contumazá y Cajabamba. En Piura, tras el fallido ingreso de la minera Manhattan (truncado por el cacherito Arana y el obispo hippie de Chulucanas), miles de mineros ilegales depredan la zona, contaminando con mercurio el río.
Nunca entenderé como los "ambientalistas" se ensañan contra la minería legal, que siempre puede ser supervisada, acotada, sancionada; y se hacen de la vista gorda contra la minería ilegal, que además de depredar el medio ambiente tiene un nocivo efecto en la sociedad, siempre generando tráfico de personas, de drogas y prostitución infantil.
Será que la plata de los hippies europeos viene con un sólo fin y con la plata baila el mono??
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