Monsanto y los transgénicos

Hace algunos años trabaje en una empresa agrícola. Cuando programamos sembrar maíz amarillo duro, en un área considerable, tuvimos en la puerta al representante de Monsanto (y a otros mercaderes más) promocionando sus maices "hibridos".

Como no soy agrónomo, desconocia los términos referidos a las variedades de semilla. Al final descubri que un agricultor puede utilizar semilla obtenida de 5 formas:

1. Selección de granos de maíz de la cosecha previa. Casi siempre con resultados malos o muy malos, con productividades promedio de 5TM (o menos).
2. Compra de semilla a algún proveedor local. Con resultados similares al caso anterior.
3. Compra de alguna semilla de línea pura, generalmente a centros regionales de producción de semilla, institutos de investigación o universidades. Con resultados más homogéneos pero con una expectativa de productividad relativamente baja, alrededor de 7TM.
4. Compra de un "hibrido", resultado del cruce de 2 (o quizas más variedades), producidos generalmente por grandes empresas internacionales. Los hibridos intentan recoger las mejores caracteristicas de cada variedad y tienen una expectativa alta de productividad (por encima de las 10TM). La desventaja es que, por lo general, requieren un manejo más cuidadoso y técnico. Fallas graves en el proceso de cultivo pueden afectar drásticamente los resultados.
5. En teoria, compra de una semilla modificada genéticamente o "transgénica". Prohibidas en el país, pero con un incipiente mercado negro (se ha encontrado trazas de las mismas en los principales valles maiceros de la costa). La expectativa de productividad es muy alta (más de 12TM), con una (en teoria) resistencia muy alta a las plagas.

Ventajas y Desventajas de cada tipo de semilla

- Las alternativas 1 y 2, no ofrecen ninguna posibilidad de alcanzar una productividad decente. Estan basicamente restringidos a los agricultores de subsistencia. La ventaja es que la semilla es gratuita o de muy bajo costo.
- La alternativa 3 es, quizas, la ideal para un agricultor pequeño, poco tecnificado que intenta desarrollar un cultivo en serio. Puede servir de tránsito para llegar a la alternativa 4.
- Considero que la alternativa 4 es la óptima. La semilla es relativamente cara, pero la idóneidad de la misma garantiza una alta productividad. Existe un riesgo importante referido a factores climáticos, de suelo y de disponibilidad de agua, pues cada híbrido reacciona en forma distinta. Es por ello necesario un manejo técnico adecuado, que permita identificar el hibrido ideal para cada zona.
Trabajar con híbridos recoge la larga tradición de domesticación de nuestros ancestros. Se trata de acelerar los procesos de selección natural, mediante el trabajo en laboratorio. No existe ningún riesgo para el consumo humano (directo o indirecto) por tratarse de maices naturales, simplemente mezclados. La única crítica, bastante valedera por cierto, es el alto costo de los mismos y la falta de un mayor desarrollo nacional.
- La alternativa 5 es una mierda completa. No hay estudios que demuestren las inocuidad de los maices (ni de cualquier otro vegetal) manipulados geneticamente. Al maíz le pueden insertar genes de insectos, de animales o de otras plantas, para lograr caracteristicas especificas. Que tanto puede afectar esto al ser humano, creo que bastante (y la mayoría de los cientificos lo considera asi). Sin embargo Monsanto es tan poderosa que manipula a muchos políticos y miembros de la comunidad científica.
Felizmente, hasta ahora, el Perú no acepta el ingreso de los transgénicos. Considero que siendo un país tan megadiverso y con tanto potencial en la agricultura moderna (la realmente moderna, la orgánica y de biodiversidad), sería una estupidez aceptarlos. Que Grobman y sus amigos sigan llorando.