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Nuestro injusto mundo

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jueves, 21 de julio de 2011

Porque no soy de izquierda

Nunca me he considerado un hombre de "izquierda", todo lo contrario, siempre he creído que soy un hombre de "derechas". Sin embargo, soy de derecha más que por una convicción ideológica o una doctrina, gracias a diversos factores que me impiden ser de "izquierda".

- En primer lugar soy optimista por naturaleza, siempre trato de ver, encontrar, ubicar lo bueno de las cosas. Solamente por este motivo me sería imposible ser de "izquierda".

- No soy envidioso, me alegra que otras personas progresen y avancen pues al final el progreso genera sinergias, si unos avanzan, todos podemos avanzar. No creo en la suma cero.

- No soy receloso ni ando soñando con "teorías de la conspiración". Por lo tanto no podría pasarme la vida echándole la culpa de mis males y los de mi país al "imperialismo yanqui".

- Creo ser bastante racional, no me como los cuentos fácilmente. Mucho menos las palabras populacheras y los lugares comunes. Ergo, no podría ni creerme ni ser feliz con discursos populistas y oportunistas.

- Cuando niño pensaba: Si Cuba y la RDA son el paraíso, porque los cubanos y los alemanes del este arriesgan su vida para salir del "paraíso marxista". Por último, si los que quieren escapar son reaccionarios y parásitos, ¿porque el estado no los deja salir? y de yapa, ¿porque es necesario el muro de Berlín?. Los izquierdistas nunca pudieron responder mis preguntas.

- Porque la historia escrita por los vencedores me parece infame. Stalin y Mao asesinaron (cada uno) a más personas que Hitler y Mussolini juntos. Con el agravante que eran sus conciudadanos. Sin embargo la "historia" no dice nada al respecto y, por el contrario, nos pinta a Hitler y Mussolini como los "grandes genocidas de la historia".

Si sigo explorando dentro de mi mente, encontraría unas 10 (o más) razones que me impiden ser de izquierda. Por cierto, cuando escucho, leo o veo a Marisol Espinoza diciendo que todo esta podrido y nada vale, me convenzo más que la mezquindad es patrimonio exclusivo de los izquierdistas peruanos.

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